lunes, 8 de diciembre de 2014

Diario de "Mochileros en Nicaragua"- Cap. 4/ Ometepe: isla de volcanes. Parte II


DÍA 2


RESERVA NATURAL OJO DEL AGUA

Nuestro segundo día en Ometepe empezó en el anteriormente mencionado Restaurante Samaritano Beach, frente al abrumador Lago Cocibolca.
Vistas desde restaurante Samaritano Beach
Previendo que nos esperaba otro intenso día, pedimos un desayuno completo, contundente: "gallo pinto"con vegetales de la huerta, pan casero, y chocolate natural. Por tan solo 240 córdobas gozamos del mejor desayuno de toda nuestra estancia; tal vez era el sitio, tal vez el ambiente, tal vez el trato o el entorno paradisíaco...
Restaurante Samaritano Beach y "gallo pinto" con vegetales de la huerta
Restaurante Samaritano Beach y "gallo pinto" con vegetales de la huerta
A la salida del Samaritano Beach, camino a la carretera adoquinada, se despedía de nosotros este curioso trío de aves que posaba para nuestra cámara. Posteriormente, descubrimos que tres no siempre son multitud, menos aún cuando una pareja acoge al nuevo compañero que ha enviudado recientemente.

RESERVA NATURAL OJO DEL AGUA

Aquella calurosa mañana, la primera para la hicimos en uno de los mayores atractivos turísticos de la isla: la Reserva Natural Ojo del agua.
Aves de Ometepe
Nada más llegar a la entrada del recinto, el guarda nos entretuvo con una divertida presentación del entorno. Nos echamos unas risas ya que llegó incluso a decirnos que nos crecería el pelo. Uno que yo me sé pago las 150 córdobas en el acto y allá que nos fuimos. Nos pusimos los trajes de baño en unos rudimentarios cambiadores y nos zambullimos en esta singular piscina natural, o semi, al menos. 
Ojo del Agua
Ojo del Agua
Las dos "piscinas" de 40 m de largo y 2 m de profundidad se llenan con el  agua proveniente de un acuífero subterráneo. Es por ello que, al estar en constante renovación, la temperatura se mantiene fresquita, cosa que se agradece mucho; nada que ver con los tibios caldos del lago. No es posible escribir estas líneas sin decirlo: el agua es absolutamente CRISTALINA, una pasada.
Ojo del Agua
Ojo del Agua
En el perímetro hay sillas de madera para sentarse al sol y un pequeño bar.  El camarero incluso te trae la bebida, o comida, hasta tu "trono". Nada mejor que un coco con roncito...
Mariposa en Ojo del Agua
Mariposa en Ojo del Agua
Aunque el entorno de las piscinas ha sido adaptado para los visitantes, a primera hora de la mañana, cuando todavía no han llegado oriundos y turistas, el bosque que las rodea mantiene su apariencia salvaje, virgen.

PLAYA SANTO DOMINGO

Continuamos con nuestra ruta y condujimos nuestra moto hasta la zona de Playa Santo Domingo. Allí se ubica la mayor zona hotelera de la isla.

La playa tiene 4 km de largo, arena parda fina y un viento que sopla constantemente, por lo que el intenso calor se hace más llevadero.
Playa de Santo Domingo


De todas formas, es aconsejable alejarse de la zona turística y dirigirse a la parte norte de la playa, donde llega menos gente. Es un sitio ideal para bañarse y pasar un buen rato tirado al sol.
El problema de esta playa son los microscópicos mosquitos que, de forma continua, chocan contra tu cuerpo, cara, pelo... como si de arena movida por el viento se tratara. Es increíble, hay millones!

Pero no tiene importancia si, de repente, se pueden admirar manadas de caballos o una serie de vacas que llegan hasta allí para aplacar su sed en las dulces aguas del Gran Lago. 
Caballos en la Playa de Santo Domingo
Caballos en la Playa de Santo Domingo
Vacas en la Playa de Santo Domingo
Vacas en la Playa de Santo Domingo
Estos detalles, estos momentos especiales a la par que extraños, hacen que valoremos el hecho de viajar lejos de casa. 
Vacas en la Playa de Santo Domingo
Vacas bebiendo en el lago Nicaragua

CASCADA DE SAN RAMÓN 

Nuestro siguiente objetivo era la cascada de San Ramón. El trayecto hasta allí se hace largo. La carretera que recorre el sur de Ometepe, bajo el volcán Maderas, está sin asfaltar y llena de baches. Todo se complica un poco más si te pilla, como a nosotros, una tormenta tropical en todo su esplendor.

Aún así, el recorrido merece la pena, permite ver a la gente que allí habita, sus "casas" y la forma de vida en la parte menos poblada y más natural de la isla.
De camino a la cascada San Román
Para acceder a la cascada hay que llegar a la "Estación Biológica de la Cascada San Ramón", pagar una entrada de 200 córdobas (con moto) y aparcar en un parking a partir del cual empieza una caminata de 2 horas.

Lo nuestro se quedó en un intento. Llegamos un poco tarde y a medida que nos íbamos adentrando en el espesor de la jungla por el difícil y mal señalizado sendero, vimos que la niebla empezaba a envolver la falda del volcán Maderas... Decidimos no arriesgar, y nos dimos la vuelta. 

Una pena... aunque aquello fue estar en medio de la naturaleza en estado puro. Había arañas como puños!
Acceso a la cascada y jungla
Acceso a la cascada y jungla


Agotados, nos fuimos al hotel a cenar y descansar.

DÍA 3

ALTAGRACIA

El tercer día lo comenzamos yendo a visitar Altagracia: el segundo pueblo más grande de Ometepe, puerto de salida de los ferrys a San Carlos.

Nota: los horarios y días de salida de los ferrys a San Carlos se han modificado, así que ojo con lo que pone en vuestra guía. Actualmente, salen los jueves a las 9 p.m. y los lunes a las 6 p.m.
Altagracia
Altagracia
Desde allí, volvimos a Playa de Santo Domingo. Eso sí, antes de bajar a la arena, nos tomamos un jugo natural en uno de los puestecitos al borde de la carretera.

100 córdobas por dos zumos tamaño katxi! Buenísmos!

Además, pasamos un buen rato con las hijas de los dueños y las cuatro ardillitas que tenían domesticadas.
Pasando el rato en la cabaña de los zumos naturales
Pasando el rato en la cabaña de los zumos naturales
A los diez minutos de bajar a la playa, el cielo se puso negrísimo. Otra tormentita tropical!
Playa de Santo Domingo
Playa de Santo Domingo
Aquello terminó pareciendo un pequeño tifón. De hecho, tuvimos que resguardanos junto a unos cuantos guiris en un mini-kiosko abandonado; el de la foto bajo estas líneas. Menos mal que sólo duro unos minutos!
Nuestro refugio
Nuestro refugio
Como la playa se quedó desierta, algunos aprovecharon para bajar a lavar la ropa o, incluso, la bici.
Después de la tormenta
Después de la tormenta
Y otros, como nosotros, para hacer carreras por la arena con la moto! En un principio pensamos que era un poco salvajada, pero no pudimos resistirnos y la experiencia fue una pasada!
Después de la tormenta
Después de la tormenta

RESERVA DEL "CHARCO VERDE"

El Charco Verde (entrada de 40 córdobas) cubre 20 hectáreas de bosque tropical y es el hogar de abundante flora y especies animales.
Reserva "Charco Verde"
Reserva "Charco Verde"
Esta reserva ecológica toma su nombre de la laguna con aguas verdes que la preside. Dicen que los indígenas la utilizaban como lugar de sacrificios y peticiones para sus Dioses.
Nosotros hicimos un recorrido circular, bordeando la laguna. Tuvimos la suerte de encontrarnos con un grupo de monos aulladores que comía plácidamente ajenos a nuestra presencia.
Monos en la reserva "Charco Verde"
Monos en la reserva "Charco Verde"
Encantados con el gran día que habíamos tenido, nos fuimos a disfrutar de nuestra última noche, cenando, como no podía ser de otra manera, en el Samaritano Beach.
De vuelta a casa temimos encontrarnos con el espíritu de "Chico Largo".

DÍA 4



El último día el barco a San Carlos no salía hasta las 9 p.m. así que descansamos en la playa frente a nuestro hostal.

Actualización a 23/08/2017: Según una lectora del blog que está de viaje por Nicaragua, actualmente no existen barcos que enlacen Ometepe con San Carlos.

Cuando se acercó la hora de partida, tomamos uno de los buses que pasan cada hora aproximadamente destino Altagracia (10 córdobas).

Allí, mientras esperábamos que saliera la minivan que te lleva al puerto (50 córdobas), entramos en la iglesia que hay frente a la plaza. Encontramos una sencilla exposición de algunas de las estatuas indígenas encontradas en la isla: enormes representaciones de los Dioses del pueblo Nagua.
Y con esta última visita, dimos por terminada nuestra estancia en Ometepe.
Esculturas indígenas y plaza de Altagracia
Esculturas indígenas y plaza de Altagracia
He de decir que los cuatro días que allí pasamos fueron de los mejores del viaje, tanto por la belleza del entorno como por la tranquilidad que se respiraba.

Ometepe es PURA VIDA!








Follow my blog with Bloglovin

1 comentario:

  1. Nos vamos un par de meses a Nicaragua y me está sirviendo de mucha ayuda vuestro blog.

    Habéis visto muchas arañas grandes tipo tarántulas, durante el viaje? Les tengo pánico!!! Mi único miedo.

    ResponderEliminar